Hablar de Iquitos, ciudad enigmática y bella ubicada en la selva nororiental peruana, es hablar de un sitio cargado de misticismo, diversión, bellas mujeres, ruidos por todos lados, exquisita comida, juerga hasta el amanecer, paisajes excitantes, tragos afrodisíacos, políticos desubicados, avenidas estrechas, helados tropicales, medicina natural, calor descomunal y lluvias inesperadas.
Iquitos se ha transformado en los últimos 10 años; de ser una ciudad tranquila y silenciosa, ha pasado a ser un centro de comercio importante. En el Jr. Prospero, la calle principal de las tiendas comerciales, se puede ver suntuosas y colosales construcciones que sirven para atraer la atención de los potenciales compradores. Uno puede caminar a lo largo de sus 11 calles viendo todo lo que se ofrece, detenerse a comer un helado o algún otro antojito y seguir caminando. BTL, Boticas Arcangel, Boticas & Salud, Inkafarma, Platanitos y Topy Top, son algunas de las tiendas - con capitales extranjeros y nacionales – que han invertido en la construcción de sucursales.
La diversión, otro de las cualidades fuertes de Iquitos, ha sabido ganarse un lugar en el Perú, el tener dos grupos musicales, Kaliente y Explosión, les da cierta relevancia en la capital y demás ciudades, sobre todo en la zona de selva. Bailar con los contagiantes temas de Explosión, en el gran complejo naval y en compañía de hermosas mujeres que contornean la cintura en cada golpe de la batería, mirando por todos lados y siempre con una sonrisa en los labios, es inolvidable. La cantidad de cerveza que se consume en estas fiestas hace que Iquitos sea un lugar clave para la producción de cerveza, al menos eso se pensaba, pero al parecer, la gente esta acostumbrada a tomar cervezas de una sola compañía.
Iquitos esta considerado entre las cuatro ciudades que más cerveza consume en el Perú, solo en fiestas de fin de semana se puede llegar a un consumo de 800 a 1000 cajas, de hecho que los accidentes son algo común, problema que el “plan zanahoria” implantado por la Municipalidad de Maynas para regular el consumo de alcohol no ha logrado controlar. Recuerdo que el alcalde, motivado por ejemplos de distritos como Surco y Barranco en Lima, quiso ejecutar algo similar en nuestra ciudad, que de hecho tiene diferencias con los mencionados, así que contra reclamos e insultos creo el “plan zanahoria” que regula la venta de alcohol hasta las tres de la mañana los fines de semana (viernes, sábado y domingo), y de lunes a jueves hasta la medianoche.
La primera semana del plan, los dueños de orquestas, administradores de discotecas y todo aquel que tenia un espacio donde se expenda bebidas alcohólicas salio a protestar por la arbitraria medida, incluso una gran cantidad de gente – sobre todo jóvenes – saliendo de las discos como el Noa y el Berimbau, además del Complejo del CNI y Agricobank, fueron a la casa del alcalde de Maynas, Salomón Abensur a decirle su vida con pancartas y demás, fue un alboroto en plena madrugada. Esa situación duro unas semanas, hasta que la gente tuvo que aceptar y tragarse sus palabras. A pesar de todo, la gente se las ingenia para pasarse la ley y seguir consumiendo esa dorada debilidad, ya sea en casas o lugares privados donde la ley y el serenazgo no entran.
La política ha estado demasiado marcada por la tendencia socialista de los candidatos, “cuando sea alcalde todos tendrán trabajo, mejorare la educación, habrá mejoras en el servicio de salud, construiré más pistas” es decir, mentiras en voz alta. Cada cuatro años son las elecciones regionales y municipales, cada campaña aparecen nuevos rostros, y los que no lograron entrar hace cuatro años, vuelven a esforzarse para hacerlo. Lo triste de todo, es que cuando entran se olvidan totalmente de sus funciones, salvo algunas cooperaciones con otras naciones o ciudades extranjeras, todo sigue igual, la educación sigue siendo la pata deficiente de la mesa, no solo en Loreto, sino en todo el Perú, los servicios de salud siempre con sus flaquezas y las huelgas y paros por problemas como el alza de precios en productos de primera necesidad, combustibles y bajos salarios es una constante.
No hay un enfoque general del problema, sino que todo se trata de hacer minuciosamente, en ese plan han pasado más de veinte años y los resultados no son alentadores, no se busca innovar, cambiar la visión de futuro, trabajar en un proyecto a largo plazo (10 o 20 años), mejorar la calidad de vida con centros habitacionales a precios módicos, entregar los colegios a los maestros para que ellos los administren, asi como los hospitales a los médicos y enfermeras, implementar un mejor servicio tributario, acorde a la realidad económica (no con un IGV que ya va a llegar al 20%), facilitar la inversión privada que cree mas empleo para la gente, invertir en centros de producción de camu camu, aceite, arroz, palmito, y lo que no tenemos importar de otros países a precios bajos y con aranceles justos para que a la gente una bolsa de kilo de arroz no le cueste 2 soles con cincuenta céntimos, sino 1 sol cincuenta.
La educación en la región Loreto tiene serios problemas, la razón, no hay estabilidad en la DREL (Dirección Regional de Educación), en lo que va del año 2008, se han cambiado tres veces de director, los reclamos, protestas, peleas, escándalos en ese sector son un dolor de cabeza, no solo para los maestros sino también para la población que ya se aburre de lo mismo, pero contra todo esto, los colegios tratan de cumplir el plan anual trazado y los alumnos, bueno, hacen su mayor esfuerzo para no ahogarse en ese sistema ortodoxo y mutilante. La injerencia política para decidir quien asume el cargo de director tiene mucho que ver, se saca a un docente en educación que tiene grado de doctor, con mayor capacitación e ideas, el cual estuvo en el cargo dos semanas, para que en su reemplazo entre una persona con estudios en un pedagógico y que trabaja en la zona rural de Loreto, no es discriminación de capacidades, sino que es una apreciación seria y lógica, yo prefiero ir a un dentista antes que aun técnico dental.
Iquitos es una ciudad de ensueño para muchos, pero para otros solo es el lugar donde los sueños se frustran, el desempleo masivo, el crecimiento demográfico, la escasez de oportunidades y la falta de servicios realmente gratuitos, hacen que la gente mire con desagrado la vida, todo lo necesario para el cambio esta en la misma gente, pero también depende mucho de la educación, no obstante, Iquitos sigue avanzando con los años, aunque lento, pero se augura un mejor panorama para los años venideros, ojala que se elija bien a los próximos gobernantes y la política a trabajarse.
(I PARTE)
