lunes, 16 de abril de 2012

CREMA VOLTEADA

Un clásico deslucido y sin ideas fue el que vi ayer entre Universitario de Deportes y Alianza Lima en el estadio nacional, el cual lució un lleno espectacular en sus cuatro tribunas. En la previa al partido los jugadores merengues calentaban en los exteriores de los camerinos; a unos pasos, Chemo del Solar coordinaba con su preparador físico y su asistente algunas estrategias. La expectativa por el clásico no era tanta ya que los problemas dirigenciales de los equipos que compiten en la primera profesional han opacado la productividad futbolística sumiendo al campeonato en una mediocridad deportiva que no se veía años atrás (y que se ve reflejado en los resultados de la selección nacional).

Alianza Lima fue el equipo que dominó el encuentro y entró con iniciativa al gramado del remozado estadio nacional. Un descuido de la defensa crema permitió el primer y único tanto del encuentro mediante un zapatazo inatajable de Fernández. Después del gol el partido se tornó de ida y vuelta con más empuje que ideas. Ninguno de los conjuntos mostró un esquema táctico ni técnico que rompa el prototipo y la realidad de lo que es el campeonato local. Un fútbol improductivo y paupérrimo que demuestra las falencias de dos grandes del futbol nacional que tienen impagos a sus jugadores y trabajadores y que mantienen millonarias deudas con la SUNAT.

Víctor Hugo Rivera, árbitro del encuentro, se comió un penal (con todo y pelota) al chino Jiménez en el área blanquiazul. Penal que pudo haber emparejado las cosas luego de la expulsión de Ascues y que habría sido un justo final para un clásico colorido. Mención aparte merece el hincha peruano (de la U y Alianza), quien sufre en carne propia el vía crucis que padecen el plantel de jugadores, comando técnico y trabajadores (algunos impagos desde el año pasado). Días atrás Sergio Markarián le dijo “miserable” a un hincha por que este le pidió explicaciones de su trabajo con la selección. Si no se toman previsiones (una excelente salida seria privatizar o vender los equipos), el futbol peruano está condenado a sucumbir en la mediocridad.

lunes, 9 de abril de 2012

EL GATO TRISTE Y AZUL

“Cuando era un chiquillo, que alegría. Jugando a la guerra, noche y día”. “Lady Laura, abrázame fuerte, Lady Laura, un cuento otra vez, Lady Laura”. “Que será de mi, necesito saber, hoy de tu vida”. Son algunas de las letras de las canciones del cantautor brasileño Roberto Carlos. Imbatible personaje que marcó mi infancia con sus producciones musicales. La primera vez que los escuche fue a los 5 años, cuando mi padre oía sus canciones después del almuerzo (en aquella época no existían radio La Inolvidable ni radio Felicidad). La sinceridad en su interpretación y la melancolía en sus letras hicieron que se convirtiera en uno de mis cantantes favoritos a tan tierna edad.

Y aunque no fue hasta segundo grado de primaria cuando recién lo vi por revistas y en televisión, siempre me lo imagine como un tipo de buen corazón, sincero al hablar y de una vida trajinada. Hace algunos días lo volví a ver en televisión y me di cuenta que han transcurrido más de 20 años desde aquel episodio. Él está más viejo, pero igual de risueño. Y yo estoy más gordo, pero igual de melancólico. Me entere que dará un concierto en Lima el 26 de abril (5 días después del cumpleaños de mi novia). Estaba considerando ir a verlo, ya que mi Lady Diana es una de sus principales admiradoras y suspira con sus canciones de antaño. Ojalá podamos cantar junto a él: “yo quiero tener un millón de amigos…”.

CRECIENTE DE LOS RÍOS EN LORETO CONTINUARÁ EN ABRIL Y MAYO

El último viernes al mediodía el presidente Ollanta Humala sobrevoló la ciudad de Iquitos para constatar los estragos causados por la creciente de los ríos, ya que en esta zona del país se habla de 180 mil afectados. Junto al mandatario nacional arribó el ministro de salud, Alberto Tejada, quien se quedó en la ciudad para coordinar las acciones de apoyo y los temas de salud en los albergues temporales. Previo al arribo del mandatario nacional, un avión Hércules de la FAP aterrizó con 200 baños químicos, colchonetas y medicinas para los damnificados de los distritos de Belén, Punchana e Iquitos.

Según el SENAHMI, el caudal de los ríos ha alcanzado 118 metros sobre el nivel del mar y se informó que durante los meses de abril y mayo continuarán creciendo. Inicialmente se decía que la creciente cesaría los primeros días de mayo, pero, con esta afirmación del servicio de meteorología, las acciones de contingencia deben replantearse. Una de las primeras acciones ha sido reubicar a los damnificados en albergues temporales. No obstante, dada la magnitud del tema, se hace necesario un traslado permanente de los moradores de las zonas inundables a terreno firme (previa habilitación urbana del GOREL y/o gobiernos locales).

Hace unos días, el empresario avícola Jorge Monasí y su ex esposa Rosalvina Cheglio donaron al GOREL 64 hectáreas de terreno en el kilometro 13 de la carretera Iquitos – Nauta. Terreno que, junto a las 14 hectáreas del GOREL, suma 78 hectáreas para más de 18 mil familias. Por su parte, el director de salud, Rodríguez Ferruccci, anunció que se están adoptando las medidas de salubridad oportunas con la designación de personal médico para las zonas afectadas. En algunas zonas, se han reportado apariciones de serpientes, roedores y alimañas, situación que agrava las condiciones de vida de los afectados.

La creciente de este año está por superar la de años anteriores por 84 centímetros. Siendo importante la habilitación de zonas urbanas y el saneamiento de las mismas para albergar a miles de familias de manera permanente. Este fenómeno natural nos demuestra la ausencia de proyectos de vivienda para los más pobres y la falta de interés de los gobiernos locales por solucionar un problema que data de los años 70 y 80, cuando Iquitos estaba en expansión y las invasiones eran un común denominador. Lo ideal sería que los gobiernos sumen presupuestos y aprovechen los terrenos donados para beneficiar a los más necesitados.





martes, 3 de abril de 2012

ALCALDE DE PUNCHANA ENTREGA TIERRAS A DAMNIFICADOS EN PROPIEDAD PRIVADA

No entiendo cómo el alcalde de Punchana, Juan Cardama Guerra, cometió el error de repartir un terreno (con título de propiedad) entre más de 450 damnificados por la creciente de los ríos en el kilómetro 11 de la carretera Iquitos – Nauta sin tener en consideración el respeto a la “propiedad privada” y el delito de “usurpación de tierras”.

Según la nota de prensa del municipio distrital, Cardama Guerra era el primer alcalde en solucionar el problema de los damnificados, ya que, aparentemente, había conseguido lotes de terreno en el kilómetro 11 de la carretera Iquitos – Nauta, terrenos que, según el cuestionado dirigente Segundo Guevara, le pertenecían a él.

Esta afirmación y la grandilocuencia con la que se difundió la información fueron desbaratadas en un santiamén por el dueño del terreno, Alonso Vargas, quien indicó que denunciará a las autoridades involucradas por usurpación de tierras, agregando que es inaudito que traficantes de tierras sigan sorprendiendo a los gobernantes y a decenas de pobladores.

Ayer en la noche el señor Vargas afirmó que el desalojo es inminente por parte del Poder Judicial y que se siente apenado por la situación de los afectados por las inundaciones. Sin embargo, se debe entender que el terreno le pertenece a él. Además, acotó que el GOREL, presuntamente, había enviado calaminas para la inmediata construcción del local comunal en el terreno de Vargas.

Motivo por el cual envió una carta al presidente regional (el 27 de marzo) indicando que el terreno era de su propiedad y que cualquier apoyo a invasores es tomado como una complicidad en el delito de usurpación de tierras. Carta que fue respondida a los días aseverando que el GOREL no se compromete con traficantes de tierras ni con invasores de propiedad privada, sino que fomenta la formalidad.

El alcalde de Punchana deberá responder ante el 6to Juzgado Penal cuales fueron las causas que motivaron la repartición de lotes de terreno en un espacio geográfico con título de propiedad. Ya que esto representa una ilegalidad en el accionar de la autoridad distrital, quien a inicios de año afirmó que los pobladores que viven en zonas inundables deben solucionar sus problemas solos.


domingo, 1 de abril de 2012

ALEX MANGA Y LOS DIABLITOS

Honestamente, debo confesar que conocía a Alex Manga por los afiches colocados en algunas calles de Iquitos anunciando su show en el Centro de Convenciones del Pardo. Yo no soy muy devoto de los vallenatos (a excepción de algunos antiguos que me recuerdan mi niñez), pero mi esposa Diana si y estaba decidida a asistir al concierto para escuchar “los caminos de la vida….”. Canción que, según ella, le recuerda a su familia y en especial a sus hermanos.

Así que fuimos al local con dos de sus amigas (Fabiola y Manuela). Llegamos pasada la medianoche y nos instalamos debajo de la zona vip, junto a la cantina (para variar). Debo confesar que el espectáculo del grupo musical Explosión es otra cosa y el escenario también (sonido y luces de última generación). Las bailarinas ni que hablar y la musicalización, de lujo.

Tras esperar una hora, el animador indicada que “en breves minutos, desde Colombia, Alex Manga y los Diablitos…”. Un vasito de cerveza para refrescar la garganta y varias botellas a mi costado (deben ser de los de al lado). Las amigas de mi esposa no toman mucho así que me empuje, prácticamente solo, una caja en toda la noche. El cantante colombiano salió al escenario con una camisa blanca, jeans y zapatos negros de punta, el acordeonista lo acompañaba.

Tras unos contactos, subimos a la zona vip para apreciar mejor el show. Nos instalamos en las barandas y, sin darme cuenta, yo también estaba cantando con mi esposa y sus amigas. No sabía que Alex Manga cantaba canciones que me recordaba mi niñez. Coreaba “tú vas a volar, tú vas volar, te quiero olvidar, yo te voy a olvidar…”. Una de las canciones que me transporta a los 9 años de edad cuando jugaba fulbito con mis amigos en la pista día y noche.

Lo cierto es que la pasamos muy bien y nos quedamos hasta las 4 de la mañana (y eso que nuestra idea de fin de semana era ver una película en la cama con canchita en la mano). No pues. Ese no es un buen plan de fin de semana. Lo único malo fue el sachacolombiano que estaba a mi lado, quien no dejaba de golpearme al bailar, generando malestar en mi persona (y aunque no soy de agarrarme a golpes, el tipo estaba haciendo merito para lograrlo).

Alex Manga ya se fue (y con muchos besos y abrazos encima). No sé si algún día lo volveré a ver o a escuchar cantar. Pero sé que aquel concierto en el local de la Av. Cáceres me reconectó con mis orígenes, con mi antiguo barrio, con mi madre, mi padre, mis hermanas, mis amigos, mis motivos de vivir, lo lindo que es cuando estas enamorado. Me conectó con una parte de mí que creía perdida. Buen trabajo Alex Manga y vuelve pronto por Iquitos.